No cabe duda que Riobamba es una ciudad agradable, lo destacado es mirar a sus volcanes en rededor y sentirse parte de esta bella naturaleza, es decir el entorno marca un poco nuestra existencia. Pero ya ingresando a las calles, los mercados y demás, se empieza por toparse con cientos de baches, basureros, perros callejeros y otras cosas que contrastan con la belleza de la ciudad.
Aparte se puede encontrar con gente amable, solidaria, fraterna; pero igualmente se encuentra en los restaurants, en almacenes incluso en hoteles, ni digamos en colectivos, con gente agresiva, prepotente, abusiva, que ni siquiera entregan una información de una manera agradable.
Quiza nos hace falta trabajar desde la institucionalidad y desde cada uno de nosotros por ser, seres amables, sin ser cómplices de corrupción, ni cosa por el estilo.
Quiza es cansino proponer la discusión respecto a los valores y desvalores que nos caracterizan para ser designados riobambeños, pero creo que es una urgencia, cultivarnos para sentirle a esta tierra parte interna nuestra, nuestra esencia, nuestro corazon en realidad y dedicarle y dedicanos amabilidad, aprecio, respeto, cariño, cierto que las cosas y las actitudes no pueden cambiar de la noche a la mañana, pero en lugar de hacer desfiles de modas imitando a otros lugares que se destacan por ello, porque más bien nuestras reinas y quienes quieran parecerse, sean realmente seres humanos, que estamos aqui para compartir la existencia.
Un abrazo a todas y todos, continuemos para cambiar o empecemos los cambios, este tiempo y espacio historico asi nos señalan.
jorge