150 KM

Nos encontramos en la mitad de un extenso feriado, y las opciones para salir tienden a ser a la vez monótonas y predecibles, lo que no deja de ser lamentable si tomamos en cuenta la extraordinaria variedad de atractivos que se ofrece a nuestro alrededor casi todos ellos desconocidos para nosotros.

He realizado el día de ayer el trayecto más sugestivo y sorprendente del que tenga memoria en nuestro país, y es necesario comentar que el mismo nace desde nuestra ciudad de Riobamba, se eleva de manera vertiginosa hasta la población de Flores atravesando por Cebadas donde a propósito podemos encontrar el mejor queso mozzarella de toda la región  hasta  enfilarse de manera decidida a las vertientes del rio Cebadas en la inhóspita y fascinante belleza de Atillo y sus lagunas, escoltadas de misteriosos monolitos que ha 3600 metros de altura no tienen parangón, sus lagunas de belleza inigualable son un premio más que satisfactorio para los aventureros que han alcanzado este sector, vistas panorámicas sin igual, en medio camino dos opciones para saborear una trucha o alguna especialidad de la zona en los paraderos de Atillo, al continuar súbitamente nos sorprende el descenso del Parque Nacional SANGAY, Patrimonio Cultural de la Humanidad donde nos aguarda el más maravilloso tesoro del trayecto, el bosque húmedo de altura, verdes intensos en riscos escarpados delinean agudas puntas e impredecibles desfiladeros, descendemos al túnel. Mas de 100km de buena carretera hasta la población de 9 de Octubre anticipan la llegada a la ciudad oriental más antigua del país que nos recibe coqueta y señorial con garantía de promesa cumplida, la mejor guayusa y yuca que conozca, en una jornada desde nuestra ciudad con poco esfuerzo armados de buena voluntad seguro colmaremos nuestras expectativas.