Cualquier tarde sirve para recordar
el significado de esta libertad.
En cualquier esquina de la gran ciudad
aparece un niño con su soledad,
aparece un niño con su soledad.

Semáforo en rojo se pone a limpiar
parabrisas de un auto, sin preguntar.
La rutina diaria de sobrevivir,
la batalle estéril para sonreír,
la batalle estéril para sonreír.

Semáforo en rojo, monedas, harapos,
caricias, antojos, derechos de trapo.
Semáforo en rojo, infancia perdida;
promesas, despojos, se muere la vida-

Lo miramos todos con cierto desdén;
la conciencia como insobornable juez.
Dando unas monedas nos sentimos bien;
neoliberalismo implacable y cruel,
neoliberalismo implacable y cruel.

Historia que siempre vuelve a renacer,
tocando los vidrios del atardecer.
El imperio dice que todo está bien,
¿de qué catecismo me está hablando usted?
¿de qué catecismo me está gablando usted?

Semáforo...

Ese nño triste ¿dónde irá a parar?
¿será esto un acto de fraternidad?
¿o será una falsa generosidad?
¿a quién le interesa nuestra dignidad?
¿a quién le interesa nuestra dignidad?

Vienen las preguntas, vienen los porqués,
trato de explicarme, trato de entender.
¿Será que al culpable hay que castigar?
¿o no pensar nada, no reflexionar?
¿o no pensar nada, no reflexionar?

Semáforo...